
Hace ya 25 años pinté este lienzo para mi madre: su hijo pintor y mis tres hermanas... hasta el gato.
Es una especie de homenaje a Las Meninas de Velázquez, pero con una pincelada puntillista, en la línea de los experimentos que siempre me han gustado hacer. Nunca ha sido una de mis obras favoritas, pero ahora, con el paso de los años, me he reencontrado con ella como con ojos nuevos... tiene un algo, tal vez el tiempo detenido...
No hay comentarios:
Publicar un comentario